Rutina facial: es el tonico realmente necesario?

Seguro que os suena esta canción: los pasos de una buena rutina facial son: limpieza, tonificación, hidratación y exfoliación. Pero…¿y si no fuese del todo cierto? Y si un día te saltas el tónico y luego otro día y luego una semana…¿hasta que caes en al cuenta de que tu piel no parece echarle de menos?

Así me ocurrió a mí. Llevaba años usando los pasos de belleza como un robot sin “escuchar” realmente a mi piel y un día me dije: ¿por qué sigo comprando un producto que me da la impresión de que no me hace nada, ni para bien ni para mal?

Y dejé de usarlo. ¿Pero por qué en todas partes nos recomiendan usar un tónico? Es realmente necesario para todo tipo de piel o simplemente es un engaña bobos?

Tipos de tónicos

Los tónicos se pueden dividir en tres tipos según su contenido de alcohol.
Los refrescantes no contienen alcohol por lo que al ser más suaves son ideales para las pieles secas o sensibles. Los tónicos que contienen un nivel pequeño de alcohol, recomendados para las pieles normales y mixtas y por último, los tónicos astringentes que tienen un alto contenido en alcohol y propiedades antisépticas, normalmente aconsejados para las pieles grasas.

Las tareas de los tónicos son…

1. Eliminan las impurezas de la piel (¡y un buen gel limpiador también!)
Hace poco leí en una revista archiconocida que el tónico es imprescindible porque elimina los restos de suciedad que la limpiadora ha dejado. Y mi pregunta es: si tras usar tu gel limpiador habitual todavía tienes rastros de impurezas, seguro que estás usando el gel limpiador adecuado? Porque un buen gel limpiador no debería dejar rastros de suciedad, ¿no?

2. Equilibran el PH de la piel ( ¡tu propia piel hará esta tarea solita!)
Si usas un gel limpiador suave no alterará el PH de tu piel porque no afectará el estado de los aceites naturales de la piel. Además, la propia piel se “auto-equilibra” 20 minutos después de lavarte el rostro.

3. Reducen el tamaño de los poros (¿o lo parece?)
Una gran parte de tónicos contiene alcohol que a la vez irrita la piel y causa una inflamación en los poros. Esto a simple vista parece que los reduzca, pero en realidad les está haciendo más mal que bien.

4. Regulan la producción de sebo (¿seguro?)

No todos los tónicos pueden regular la producción de sebo y me temo que los que lo hacen contienen alcohol que consigue un efecto secante e irritante en la piel.
Una opción mucho más recomendable sin efectos secundarios es usar tónicos sin aclarado, serums o limpiadores que contengan ácido salicílico, y dejar el alcohol a aquellas personas que realmente tengan una piel muy grasa y lo hayan probado todo sin que les funcione mejor que el alcohol.


Si habéis leído hasta aquí pensaréis que estoy totalmente en contra de usar tónico, pero…

…en mi humilde opinión, deberías usar un tónico si….

A. Tienes la piel muy grasa y ves que realmente usar tónico marca la diferencia.

B. Usas un tónico que contenga ingredientes con propiedades hidratantes, antioxidantes, reguladores de sebo beneficiosos para la piel (los tónicos Asiáticos son estupendos).

C. Quieres probar la eficacia de la limpiadora que estás usando y comprobar que no deja rastros de suciedad en el disco desmaquillante al aplicar el tónico.

D. Tienes la necesidad de “despertar” la piel con la sensación de frescura que aporta el tónico (especialmente por la mañana).

FYI: En Asia, se usa el término “tónico” para referirse a un serum o loción muy líquida con la función de preparar la piel para que absorba el siguiente tratamiento además de proporcionar un extra de hidratación, regulación de sebo, cualquiera que sea la necesidad de la piel, por lo que la mayoría de “tónicos” en el mercado asiático contienen antioxidantes, ácido salicílico o ácido hyalurónico, etc. Son estos tónicos los que recomiendo especialmente, ya que aunque tienen la misma función que un serum o crema hidratante de tratamiento son una ayuda extra y suelen ser más económicos.


¿Y tú qué piensas? Es el tónico imprescindible en tu rutina facial?

Se abre el DEBATE!

Bsos